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Anuncios de Navidad que intentan enternecernos



 
 

Los ositos de Heathrow

Llega la Navidad y, con ella, los múltiples anuncios publicitarios que apelan a su espíritu enternecedor.

Con toda la poética de la que están dotados los creativos, en unos casos, lo consiguen, mientras que en otros… cómo decirlo… siendo generoso, se quedan a medio camino.

Un curioso y original anuncio es el que mostramos sobre estas líneas, perteneciente al aeropuerto londinense de Heathrow, del que hacen promoción.


No queremos desvelar su contenido, pero sí podemos decir que, aunque parezca simplón, contiene un mensaje realmente enternecedor.

#ThePerfectSurprise. The Girl & the Cloud

“La Navidad pasada, el papá de Ana le dio la sorpresa perfecta: su propia nube de nieve. Anna y su pequeña nube se fueron por todas partes, sin embargo pronto se enteró de que a veces, la sorpresa perfecta no es la que consigues … sino la que das, la que ofreces”. 

Este es el argumento de The Girl & the Cloud, una iniciativa nacida en Irlanda, basada en un libro y cuyo objetivo es recaudar fondos para Barnardos, una ONG dedicada a los niños y niñas sin recursos del país.

Este es el anuncio que han preparado para estas Navidades.

 


Y el que empieza a ser (temido) anuncio de la lotería de Navidad

Esta es la historia de Carmina, una maestra jubilada que tras escuchar su número en la tele, piensa que le ha tocado la Lotería de Navidad, y de cómo el pueblo entero se une para mantener viva su ilusión. Una nueva demostración de que la verdadera alegría de ganar está en compartirlo con los tuyos“.

Este es el ‘noble’ argumento del anuncio de lotería de Navidad de este 2016. Una historia inverosímil, que pretende ser realista. Y ahí es donde ocurre el siniestro error. Si ves a unos osos pasear por un aeropuerto, interactuando con los pasajeros del mismo, entras en la dinámica mental de la fantasía. Pero el numerito que le montan a la pobre maestra jubilada, sin sacarla de su error, es un disparate que no reconoce la imaginación de nadie, quizá sí la de sus creadores, a los que hay que reconocerles que, incluso, en esa tesitura, con la puesta en escena y la música elegida, logran hacernos partícipes de la triste-alegría de Carmina…

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