Contenidos
Índice
1. Los antecedentes de la Generación del 27
2. La Generación del 27, ¿fue una Generación o un Grupo?
3. Qué significa la generacion del 27 para la literatura española
3. 1. Innovaciones en la poética
4. La Residencia de Estudiantes
5. Las tres etapas de la Generación del 27
6. Las sinsombrero, las mujeres de la Generación del 27
Los antecedentes de la Generación del 27
En 1927 se celebraba el tercer centenario de la muerte de Luis de Góngora. Con tal motivo, se celebraba en el Ateneo de Sevilla un acto para conmemorar el evento. En la mesa presidencial se encuentran Rafael Alberti, Federico García Lorca, Jorge Guillén, Gerardo Diego o Dámaso Alonso, entre otros.
Este es el punto de inicio, aunque su apasionante historia está por escribir sobre una de las páginas más importantes de la lírica universal.
La Generación del 27, ¿fue una Generación o un Grupo?
La Generación del 27, también llamada Generación de la amistad, incluso Generación del 25 o el grupo poético del 27, quizá la definición más exacta.
Dámaso Alonso, en su célebre ensayo, “Una generación poética” asegura no tener claro si realmente se trata de una generación o no, indicando que faltan ciertos requisitos para calificarla así, quizá tan solo el acontecimiento inicial alrededor de Góngora.
Sin embargo,
- No hubo una figura principal sobre el resto de autores, ni siquiera Juan Ramón Jiménez.
- No hay una razón que les anime desde el punto de vista técnico, cada cual escribe a su manera e intenta innovar.
- Por último, no van en contra de nada ni de nadie, al revés, siente respeto y admiración por figuras literarias pasadas. (Dámaso Alonso: “este grupo no se alza contra nada”)
Se puede decir, en definitiva, que sin llegar a ser una generación son un grupo dentro de una generación a la que pertenecen autores de otras edades.
Sea como fuere, el término ‘generación‘ se ha impuesto para definir a todo el grupo, más allá de tecnicismos y etiquetas.
Qué significa la generacion del 27 para la literatura española
Innovaciones en la poética
La generación del 27 aportó fuertes influencias en la poesía, con:
- la búsqueda de un lenguaje distinto,
- renovación del uso de la metáfora,
- reducción de la métrica,
- utilización del verso libre o el versículo -donde Juan Ramón Jiménez es un precedente, si bien las influencias más marcadas llegan desde la corriente artística del surrealismo, de Pablo Neruda o de Vallejo -.
La generación del 27 representa el equilibrio entre tradición y renovación. De hecho, entre las influencias que albergan, se pueden dar desde el más reciente escritor, hasta poetas de generaciones perdidas en el tiempo.
Entre las tradiciones, se puede hablar de su amor por los clásicos, con Góngora a la cabeza, pero también con la revisión y revalorización de Manrique, Quevedo, Fray Luis de León, San Juan de la Cruz o Garcilaso de la Vega, por citar a los más notables.
En este sentido, es obligado citar al gran poeta Gustavo Adolfo Bécquer, al que, por ejemplo, Rafael Alberti rinde homenaje con un extracto de las Rimas en su “Sobre los ángeles”.
La Residencia de Estudiantes
La Residencia de Estudiantes, radicada en Madrid, primero en la calle Fortuny, 14, después en los Altos del Hipódromo, fue el epicentro pedagógico donde se forjó la Generación 27. No solo era una residencia en su sentido estricto. Fue un centro donde se llevaban a cabo actividades culturales, exposiciones, representaciones de obras de teatro, conferencias (aquí dictó una conferencia el mismo Albert Einstein).
Junto con la Residencia de Estudiantes, el Centro de Estudios Históricos también fue un lugar destacado alrededor del cual se reunían los autores de la Generación poética del 27. Allí, en el Centro de Estudios Históricos, impartía su conocimiento el gran historiador Menéndez Pidal o Américo Castro.
Las tres etapas de la Generación del 27
Se pueden distinguir tres etapas en el desarrollo intelectual de este grupo:
- Una primera etapa, precisamente hasta el año 1927.
- Un segunda etapa, desde 1927 hasta la guerra civil española.
- Una tercera etapa, tras la guerra civil española.
PRIMERA ETAPA: En la primera época, se perciben diferentes influencias: las del poeta Gustavo Adolfo Bécquer, las primeras vanguardias (tales como el creacionismo o el ultraísmo) que se extienden por Europa y el posmodernismo. También se percibe la influencia de lo que se llama ‘poesía pura‘, encarnada por Juan Ramón Jiménez. Esa poesía que es lo que queda del poema cuando se le arrebata aquello que no es poesía. Una paradoja, sin duda, que se expresa en centrarse en las emociones artísticas. En palabras de Dámaso Alonso, se trataría de ser aséptico en la escritura.
La deshumanización del Arte. Se ha dicho de la Generación del 27 que eran ‘herméticos‘ o ‘fríos‘, precisamente por esta razón, sin embargo, no todo en la poesía del Grupo es de esta forma. Por ejemplo, beben de la fuente de inspiración de Bécquer, como vimos anteriormente, algo que se puede observar en Lorca, en su ‘Libro de poemas‘ o en el ‘Marinero en Tierra‘ de Alberti
La metáfora, como también apuntábamos antes, la metáfora es la mejor representación de la poesía pura. Llegando a excelsas formas de expresión, y sin duda, forma parte de esta primera fase de la Generación del 27.
Los clásicos. En este caso, se percibe esta influencia en el uso de métricas clásicas. Se dice que debido a su deseo por la perfección formal en el verso. No olvidemos la influencia de Góngora en el Grupo o de Juan Ramón Jiménez.
SEGUNDA ETAPA: La segunda etapa que alcanzaría hasta el desastre de la Guerra Civil española se inicia con una salida del formalismo anterior. Es el conocido como proceso de ‘Rehumanización’, en un proceso en el que se busca una mayor complicidad con el lector, con el que se quiere comunicar de una forma más directa.
Llega, en este momento, el Surrealismo como corriente literaria, una corriente que fluye en sentido contrario a la anterior poesía pura.
Influencia política: La caída de la dictadura de Primo de Rivera y de la monarquía, el ascenso de la República y todo el contexto político-social, no podía por menos que influir en la Generación del 27. La militancia en el Partido Comunista de Alberti, es un claro ejemplo de ello. En definitiva, en su inmensa mayoría, el Grupo se mostró partidario de la República. La guerra civil española rompería, entre tantas cosas, el camino de esta generación literaria.
TERCERA ETAPA: Llegado el fin de la guerra, Lorca muere asesinado, y el Grupo inicia el exilio. A excepción de Aleixandre, Gerardo Diego o Dámaso Alonso, el grueso de los artistas de la Generación marcha de España. Sin abandonar las premisas que les conformaron como poetas, sí que se puede decir que cada uno de ellos tomó su particular camino. Por ejemplo, Jorge Guillén inicia un nuevo ciclo poético con ‘Clamor‘, mientras que otros poetas, como Alberti o Cernuda y Salinas, sienten la añoranza de aquello que les cambió la vida, la pérdida de sus vínculos, de su tierra, la nostalgia…
Las sinsombrero, las mujeres de la Generación del 27
El nombre de las SINSOMBRERO fue el sobrenombre que recibieron un grupo de mujeres cuando llevaron a la práctica un gesto que, para la época, suponía un reto, una afrenta a las costumbres, simplemente, despojarse del sombrero que cubría sus cabezas. Entre las mujeres que llevaron a cabo dicha afrenta se encontraban Maruja Mallo o Margarita Manso, y lo llevaron a cabo en la madrileña Puerta del Sol, acompañadas de Salvador Dalí y Federico García Lorca.
El gesto tenía como base una metáfora alegórica: quitarse el sombrero para liberar las ideas, quitar el sombrero para provocar una liberación. Fue un acto espontáneo, sin mayor premeditación, que consiguió un efecto inmediato ante los ojos atónitos de una sociedad enclaustrada en conceptos ‘cuadriculados’.
Como relatara la propia Maruja Mallo: “Nos apedrearon llamándonos de todo”.