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Los tatuajes se han puesto muy de moda en los últimos años.
Asociados, en general, a personas de “mala vida” hasta hace relativamente pocos años, lo cierto es que el arte de tatuarse el cuerpo es prácticamente tan antiguo como el ser humano en sociedad. Te presentamos, a continuación, los orígenes del tatuaje.
Tatuajes, desde Egipto hasta la Polinesia
Hablamos por tanto que la Historia del tatuaje se remonta a los orígenes mismos de la sociedad.
Hace cerca de 3000 años los egipcios ya decoraban su piel con tatuajes.
La momia de la sacerdotisa egipcia Amunet adoradora de Hathor, diosa del amor y la fertilidad, que vivió en Tebas en torno al 2000 a.C, mostró una serie de tatuajes lineales y simples con diseños de puntos y rayas.
Hasta 1991 era el testimonio más antiguo del origen del tatuaje, pero la Historia escribió una nueva página cuando ese año se encontró en un glaciar fronterizo entre Austria e Italia a un cazador de la era Neolítica datado en torno al 5300 a.C con la espalda y rodillas tatuadas, con motivos también de líneas y puntos.
Tatuajes en la Polinesia
Los antiguos pobladores de la Polinesia habrían sido los primeros en decorar su cuerpo con tatuajes. En este caso no se limitaban a motivos lineales y de puntos como en los ejemplos anteriores sino que grababan su cuerpo hasta cubrir la totalidad de la piel.
Se trataba de un tatuaje tribal que señalaba de forma totalmente individual a cada miembro y su estatus de tal forma que convertía a la persona en única e inconfundible.
El proceso del tatuaje se iniciaba a la edad de ocho años, cubría de cabeza a pies y era un trabajo lento y doloroso que duraba toda la vida pues los tatuajes se renovaban y decoraban sin cesar.
Significado de los tatuajes
El significado de estos tatuajes, como no podía ser de otra forma, tenía un aura mística y espiritual: las espirales tatuadas atrapaban la energía cósmica de forma que si alguien moría sin tatuar, la hechicera se comería sus ojos dejando al difunto ciego y sin posibilidad de hallar el camino hasta la inmortalidad.
El origen de la palabra tatuaje/tatoo
El propio término tatuaje hunde sus raíces en este arte polinesio. Deriva de las palabras polinesias “ta”, cuyo significado es golpear o en la expresión “tau-tau”, que hace referencia al choque o golpe entre dos huesos.
Podemos por tanto imaginar lo doloroso del proceso, a diferencia de cómo es realizado en la actualidad cuyo grado de dolor únicamente depende de la zona del cuerpo que escojamos para grabar nuestro tatuaje.
Reintroducido en la sociedad occidental en torno a 1771 tras el regreso del Capitán Cook de su expedición por Tahití, el tatuaje quedó relegado a marineros y delincuentes hasta que en los años 60 y 70 del siglo XX el movimiento hippie comenzó a sacarlo de nuevo de su letargo.
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