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El pintor y escultor italiano Umberto Boccioni (Reggio Calabria 1882 – Verona 1916) es el considerado el más importante representante y teórico del futurismo. Hijo de Raffaele Boccioni, un empleado de la prefectura italiana, la familia se veía a menudo obligada a cambiar de residencia por motivos laborales.
El artista futurista Umberto Boccioni
En 1901 llega hasta Roma, donde conoció y asistió en los estudios de importantes artistas como: Gino Severini, Mario Sironi, Duilio Cambelotti y Giacomo Balla. Pocos años después, en 1907, se instala en Milán. Ciudad en la que conoce a Gaetano Previati, representante del divisionismo italiano. La pintura de Previati acentuó en Boccioni el interés psicológico en la imagen, dando una primera formulación a su teoría del estado de ánimo y participando en un estudio directo de cómo era la sociedad industrial moderna de la época.
Gaetano Previati, la Maternidad
Con sus conceptos de “dinamismo” y “simultaneidad” Umberto Boccioni hace nacer la síntesis futurista del elemento plástico y cromático.
Después de una serie de reuniones con Carlo Carrà, Luigi Russolo, Gino Severini y Filippo Tommaso Marinetti, firman el ‘Manifiesto de pintura futurista‘. Estamos en 1910.
También en ese momento se firma el ‘Manifiesto Técnico de Pintura Futurista‘. A partir de este momento la historia de la investigación artística de Boccioni coincide con la historia del futurismo.
La escultura debe hacer que los objetos vivan haciendo que su extensión en el espacio sea sensible, sistemática y plástica. Umberto Boccioni
Plasmando las ideas del movimiento futurista
Tiempo más tarde, Boccioni se dedicaría a pintar obras en las que se llevan a cabo de forma práctica las ideas futuristas de la interpenetración dinámica de los planos y de la construcción basada en las líneas de fuerza que determinan la unidad espacial entre el objeto y el entorno. Boccioni fue autor de numerosos escritos, incluido un “Manifiesto de la arquitectura futurista“, que al parecer, hasta nuestros días, permanece inédito.
En 1911 comenzó su actividad como escultor, quizá su obra más conocida sea la escultura “Formas únicas en la continuidad del espacio”, que podemos ver bajo estas líneas.
En 1912 escribió el ‘Manifiesto técnico de la escultura futurista‘, donde, entre otras cosas, se lee: “(…) La escultura debe hacer que los objetos vivan haciendo que su extensión en el espacio sea sensible, sistemática y plástica“.
Formas únicas en la continuidad del espacio. Umberto Boccioni
Dinamismo del cuerpo humano: Boxeador. Museo Thyssen de Madrid.
El punto álgido del futurismo
Si por algo se caracterizó el Futurismo fue por la gran actividad creativa de un movimiento crítico y generalizado en toda Europa. Se podría decir que desde 1912 a 1914 fueron los años culminantes de este movimiento artístico.
Por desgracia, la Primera Guerra Mundial irrumpió en la escena creando -nunca mejor dicho- los peores escenarios que hubiera conocido el ser Humano hasta entonces.
Boccioni murió en la Gran Guerra, pero tras una caída trivial de su caballo.
Umberto Boccioni se alistó, de forma voluntaria, para marchar a la guerra. Sin embargo, en ese mismo años, 1015, hizo un primer destacamento de la poética futurista, atenuando el elemento dinámico, reteniendo el interés en la imagen plástica mediada por el estudio de Cézanne.
Curiosamente, Boccioni no falleció en la guerra como podríamos pensar. Un año después de su ingreso en el ejército, en 1916, y destacado a un regimiento de artillería, en Sorte, cerca de Verona, murió tras una caída trivial de su caballo.
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